¿Cuáles son las consecuencias fiscales de tener un hijo? ¿Pagaremos menos IRPF si tenemos un hijo? ¿Qué influencia tiene esto en nuestra declaración de la renta?
De cara a tener estos conceptos claros si alguno de nuestros lectores va a ser padre o acaba de tener un hijo, desde Bissé Asesores nos gustaría explicarte paso a paso las ventajas fiscales de las que puedes beneficiarte.
Cómo afecta tener un hijo en lo que pagas por IRPF
Al tener un hijo, es importante saber que la Agencia Tributaria aumentará la base liquidable que no está sujeta a tributación, es decir, lo que conocemos como el monto mínimo personal y familiar. De esta forma, el tipo efectivo que tendremos que pagar será menor.
El mínimo dependerá del número de hijos que tengamos, si bien hay que tener claro que sólo dispondremos de ventajas fiscales si nuestros hijos tienen menos de 25 años o existe algún tipo de discapacidad.
El mínimo personal y familiar según el n.º de descendientes que tengamos sería el siguiente:
- 2400 euros por el primer hijo
- 2700 euros por el segundo.
- 4000 euros si tenemos un tercer hijo
- 4500 euros para el cuarto hijo y siguientes, si los hubiera.
No obstante, también hay que tener en cuenta que las cuantías varían, por ejemplo, cuando el hijo es menor de 3 años. En ese caso, la cuantía aumentaría en 2800 euros. De esta forma, si tenemos un primer hijo, nuestro mínimo personal aumentaría en 5200, alcanzando así los 10.750 euros. En caso de tener dos hijos, uno que tenga más de 3 años y otro menos, el mínimo personal se quedaría en 7900 euros.
Para que resulte menos compleja la operación, puedes calcular las retenciones del IRPF utilizando el servicio de cálculo que te ofrece la Agencia Tributaria. Pongamos que eres un contribuyente con un sueldo medio de 23.000 euros anuales; en este caso, tu tipo de retención se reduciría del 14,83% al 10,53% si tienes un hijo, y 8,08%, si tiene dos.
¿Cuánto ahorraríamos mensualmente en IRPF en este caso? Prácticamente unos 70 euros si tenemos un hijo menor de 3 años y 110,89 € en caso de que tuviéramos un hijo de menos de 3 años y otro mayor de esa edad.
No obstante, ésta no es la única ventaja fiscal que obtendrías de tener un hijo. También se reudicría en 1200 euros en la cuota diferencial de tu Declaración de la Renta, si tienes un hijo de menos de 3 años. Para poder hacer esto, es necesario presentar el modelo 140 de la AEAT, y se podrá tener desde el mes en el que nace el hijo hasta el mes en el que éste cumpla los 3 años.